AL ÁNGELUS.
Al ángelus te elevas, madre mía,
al misterio te fundes con ardor,
ya tu copa consagras al amor,
virtud que tu universo conseguía.
Majestuoso equilibrio fue tu guía
a regiones solemnes, diosa y flor
engarzada en los iris de esplendor
al Santo Celo viertes tu alegría.
Persigo tu perfil, mujer amante,
te anuncia con amor la gloria pura
escanciada con luz y sal triunfante.
El Edén se recobra en tu hermosura
tus entrañas gestaron ese instante,
mi orgullo, de tu vientre ser criatura.
Rosas.