MaríaBote
|
|
« : Septiembre 29, 2011, 07:53:10 » |
|
SONETO DE OTOÑO
Ya se caen las hojas, mansamente, mientras los ocres visten las campiñas. Cubren el suelo las doradas piñas, me abonan mil pesares de repente.
Se me apresura el alma, diligente, a buscar su cobijo por las viñas, evitando furores y rapiñas. Avanza por las sendas del poniente.
Se apodera el otoño de mi tarde sin mieles y sin frutos, sin empeño; corroe mi dosel de la esperanza.
La hoguera sólo gime, ya no arde, se muere del hastío sin ensueño, al no encontrar el fiel de mi balanza.
María Bote 23 – 9 - 2011
|